Tu pregunta aun palpita entre los dedos... algo tan sencillo como una respuesta ya no soy capaz de vocalizar, de razonar y de poder contestar.
Querer para mi futuro aun no sé que puedo decir, aun no sé que será de mi vida en este hoyo que yo mismo cabo al rededor de este foso vacío de esa luz divina...
Ya no soy la misma persona... me siento opaco ante los demás, una risa falsa irrompible, que nunca se desbanecerá por miedo al sollozo que siento aquí justo, pegando fuerte en mi corazón, que a veces... se desborda... y me mata.
Ahora un supuesto "Dios" me da la oportunidad de pedir... de exigir al fin. Mi orgullo maldito... demolido a rastrojos de lo que hubo, es incapaz de desear algo que no sea mera y simple felicidad...
Quiero tu orgasmo... de una mente en blanco... de un corazón muerto... y una sonrisa perpetua...
jueves, 3 de diciembre de 2009
¿Y tu qué es lo que quieres?
Publicado por Tocado y flotando! en 14:24
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
2 comentarios:
es dificil aprender a pedir, ya te lo he dicho...
pero ánimo, todo mejorará con el tiempo, éste lo cura todo
Lo primero que quiero decir es: ¡AL FIN PUEDO COMENTARTE! Y no sabes cuantísimo me alegro de ello.
Lo segundo es que, como siempre, lo que has escrito es impresionante. Precioso. Duele, pero es precioso.
Y por último decirte que aunque no sé exactamente qué te pasa, veo que vuelves a tener problemas, que lo estás pasando mal. Pero lo único que puedo decirte aparte de un simple "¡ánimo!" es lo siguiente: puedes contar conmigo siempre que quieras, puedo intentar ayudarte y darte los mejores consejos (que puedes tomar o pasar por alto, claro). Lo que quiero decir es que siempre viene bien tener a alguien con quier hablar de esas cosas que a uno le hacen sentir mal. Al menos, eso pienso yo.
Y sin más, me despido.
Cuídate, Tocado y Flotando :)
Publicar un comentario